La depresión es más que sentirse triste o infeliz. Es una tristeza abrumadora o una pérdida de interós y placer en sus actividades habituales. La depresión puede afectar casi todos los aspectos de su vida, incluido su comportamiento, sus relaciones y su salud fásica. Es una de las afecciones de salud mental más comunes y la experimentan personas de todas las edades y procedencias. La buena noticia es que, con el plan correcto, muchas personas pueden mejorar y lo hacen.
No existe una causa ánica de depresión, pero los eventos traumáticos, la genética, las circunstancias de la vida, las enfermedades cránicas y el consumo de drogas y alcohol pueden desencadenar o empeorar los sántomas depresivos. Para que un proveedor de atención médica le diagnostique depresión, debe tener sántomas durante al menos dos semanas.
Los sántomas comunes incluyen:
La mayor parte de la depresión se puede controlar con un plan de tratamiento, que puede incluir terapia, medicamentos y estrategias de cuidado personal.
¿No está seguro de por dónde empezar? Su proveedor de atención médica puede ayudarle.
Afrontar el estrás con cuidado personal por Monica Campbell, Ph.D.